El 10 de marzo de 1959 el Dalai Lama y sus acólitos promovieron una rebelión armada. Fueron derrotados el día 28 y, con ayuda de la CIA, huyeron a India. Esa huida significaba el fin de la servidumbre y del régimen teocrático feudal en Tíbet. El Sangri-la del Dalai Lama.[1] Fue el inicio de una reforma democrática. El 95% de la población, que había sido esclavizada durante siglos, alcanzó su libertad. En Lhasa hubo celebraciones durante días. Los títulos de propiedad de los siervos se quemaron públicamente. Se prohibieron los códigos y sus inhumanos castigos corporales, se separó el poder políticos del religioso. Se abolieron los privilegios feudales de los monasterios y la tierra fue repartida. La situación cambió drásticamente:
Miles de templos fueron cerrados y sus monjes expulsados. Los templos que no participaron en la rebelión, como el del Panchen Lama, siguieron con sus actividades religiosas. Los monasterios más importantes también continuaron funcionando aunque con un número reducido de monjes. Ningún templo fue dañado. Los divulgados saqueos se produjeron años después, durante la revolución cultural.[2]
La población. En 1737, un informe de las áreas bajo la jurisdicción del Dalai Lama y el Panchen Erdeni, escrito por Wei Yuan, señalaba que la población en Tíbet era de 1.090.000 h. y que había unos 316,200 lamas.
A principios de 1950 vivían en Tíbet aproximadamente 1 millón de personas. Es decir, en 200 años la población no había aumentado.
Según el censo del 2010, la población alcanzó los 3.002.166 H. Y esto, a pesar de que en 1970 se aprobó la política de hijo único, aunque ésta no afectaba a las minorías nacionales. La etnia Han representa menos del 9% de las personas residentes en Tíbet.
A mediados del siglo XX Tíbet se encontraba todavía extremadamente aislado y atrasado. No tenía industria ni comercios modernos; ni instituciones para la ciencia, la tecnología, la educación o la sanidad. Con miles de mendigos pululando por las principales ciudades.
Edmund Candler, periodista británico, Lhasa “era miserable y mugrienta más allá de cualquier descripción, sin alcantarillado y sin pavimentar. No se veía casa alguna limpia o cuidada. Tras la lluvia, las calles eran charcas de agua estancada, frecuentadas por cerdos y perros en busca de basura."
Dortar, directivo de la radio-televisión, "Cuando llegué a Lhasa en 1951 me quedé perplejo de las deplorables condiciones. “ No había instalaciones, ni luces en las calles, ni agua corriente, ni alcantarillado. Lo que veía con frecuencia eran cuerpos de gente que había muerto congelada, además de mendigos, presos y manadas de perros. Al oeste de Jokhang (templo) había una colonia de mendigos y también había otra cerca de Ramoche (templo). El número de mendigos se elevaba a tres o cuatro mil; o una décima parte del total de la población de Lhasa”.
Antes. La falta de luz en las casas y calles era inevitable. Disponían de una única central hidráulica generadora de electricidad. Producía 125 KW que sólo alcanzaban para iluminar los palacios del Dalai Lama y algún otro Señor.
Hoy, excepto el 40% de las pequeñas aldeas ubicadas en el Himalaya, en las fronteras con India o Nepal, el 100% de las viviendas reciben de manera estable electricidad. El día 30-12-2017, Yumai, la aldea más pequeña de China, en la frontera con India, a más de 4.500 mts. de altura veía iluminarse sus 9 viviendas, en pleno invierno. Para el 2020 el gobierno autonómico está comprometido a llevar electricidad a la totalidad de las viviendas.
Antes. Las condiciones de las viviendas de la mayoría de la población eran infames, sin agua corriente, sin electricidad, sin sanitarios, eran “lóbregas” según testigos de la época.
Actualmente. El cambio habitacional ha sido espectacular. Se esfuerzan para que en el 2020 no quede ninguna vivienda insalubre.
Antes. Sin escuelas fuera de los monasterios, el 95% de la población era analfabeta. Apenas un 5% entre los jóvenes y personas de edad media podía leer.
Actualmente, Tíbet tiene un sistema educativo moderno y completo con rasgos peculiares autónomos. Consta de 15 años: educación preescolar, primaria, secundaria y superior. También de educación ocupacional, continua y especial. Es una enseñanza bilingüe.
En 2016 Tíbet tenía 6 instituciones de enseñanza superior, 127 institutos y 826 escuelas primarias. La matrícula total alcanzaba el medio millón de alumnos. El analfabetismo se había reducido al 1,2 por ciento.
Antes. No existía ningún servicio médico. El principal recurso de cura cuando enfermaban era rezar a Buda.
En la actualidad hay clínicas con dos personas en todos los pueblos. Además equipos médicos recorren las aldeas más alejadas periódicamente para vacunaciones, Etc.
Antes. La esperanza de vida al nacer era de 35.5 años.
Ahora. En 2013 era de 68,2 años y se proponen acercarse a los 80 para 2020.
Antes. No existían instalaciones deportivas.
En la actualidad la práctica del deporte está muy extendida.
En 1950 Tíbet era un territorio aislado. No había ninguna carretera. Desde Lhasa partían tres caminos, dos conducían a sendas provincias de China, Qinghai y Sichuan y uno a India. El primero, de Lhasa a Qinghai costaba recorrerlo 18 meses. El segundo, a Sichuan era más corto, pero más peligroso. El tercero, a India se tardaba en recorrer unos 103 días. El transporte de mercancías se hacía o con animales o sobre personas. Al Dalai Lama y a otros Señores los transportaban en palanquín.
A partir de 1951, con la colaboración del Ejército de Liberación Popular, se construyeron dos carreteras, una a Qinghai; y la otra a Sichuan. También edificaron el primer aeropuerto.
Ahora. En 2006 se inauguró el ferrocarril Lhasa-Xinin (Quinghai) que conecta con la línea nacional de ferrocarriles. Es la vía férrea más alta del mundo y un hito de la ingeniería de obras públicas. Hay, actualmente, 6 aeropuertos y 79 rutas aéreas.
Actualmente hay 90.000 Km. de carreteras. Para el 2020 las carreteras llegarán a todas las aldeas y al 80% llegarán autobuses. Esto ha favorecido al turismo. El año pasado 25 millones de turistas visitaron Tíbet.
Según estadísticas de 1959, entre las 220.000 Hectáreas de tierra cultivada existentes, los monasterios y los monjes de rango elevado disponían de 80.960 Hectáreas, el 36,8%; los nobles de 52.800 Hectáreas, el 24%; y los funcionarios bonzos y laicos, que componían los gobiernos, 85.580 Hectáreas, el 38,9%. El resto de la población, el 95%, no poseía tierras.[3]
1960 Reforma democrática. Los anteriores siervos y esclavos pasaron a poseer 186.000 Hectáreas de tierra. Cuando la reforma fue completada básicamente, la cosecha total de grano en Tíbet fue un 17.7% mayor que en 1958. Además, el número total del Ganado fue un 9.9% mayor que en 1959.
También en la década de los 50, con ayuda del ejército y con trabajadores traídos de otras partes de China se hicieron obras hidráulicas, se construyeron fábricas, se instalaron bancos, casas comerciales, oficinas de correos, granjas, escuelas, etc. desplegaron auxilios sociales, lucharon contra las calamidades, previnieron y trataron gratuitamente enfermedades.
1964. La Conferencia del Consejo de Estado de China tomó la decisión de deponer al Dalai Lama de su cargo político. Fue acusado de huir con su camarilla al extranjero y desarrollar actividades secesionistas. Con el apoyo de la CIA se habían instalado en India y proclamado el objetivo de lograr un Tíbet independiente. Habían establecido bases armadas en India y Nepal y lanzado intermitentemente ataques en las fronteras de China. Según documentos de la CIA, los EE.UU. gastaron anualmente 1.7 millones$ en Tíbet, en dichas actividades ilegales.
El 1 de setiembre de 1965 se constituyó la Región Autónoma de Tíbet
La estructura política es similar a la del gobierno central. La Asamblea Popular Regional ejerce la soberanía sobre el resto de las instituciones. La libertad religiosa está protegida. Los cargos políticos en las aldeas son elegidos por sufragio universal, directo y secreto, cada tres años.
Tíbet era (y es) la región más pobre de China. Las diferencias con otras provincias se agrandaron al retrasarse la reforma democrática unos 10 años. Tras la liberación de los siervos, el desarrollo económico y social en sus diversas esferas mejoró notablemente, aunque la pobreza extrema seguía siendo elevada. Los grupos guerrilleros al servicio del Dalai Lama, armados, entrenados y financiados por la CIA fracasaban al no tener el apoyo de la población. Al final de los años 70 desistieron. Cambiaron su estrategia. Crearon la falsa imagen del Dalai y consiguieron un apoyo internacional incuestionable.
REVOLUCIÓN CULTURAL
Poco después de constituirse la Región Autónoma de Tíbet, en 1966 se inició la revolución cultural proletaria en China que convulsionó todo el país, al menos durante 10 años. En Tíbet, los efectos de los enfrentamientos fueron dañinos y duraderos. Se persiguieron las prácticas religiosas y se ridiculizaba a las personas creyentes; se atacaron las pagodas, y se llevaron a efecto muchos desmanes, lo que debilitó los apoyos y la simpatía de la población tibetana hacia el gobierno comunista.
A partir de 1978 la política dio un importante giro, se liberaron presos y se permitió salir a visitar a familiares exiliados. También se emitieron visas a grupos de exiliados para que pudieran visitar Tíbet. Se intentó una negociación con el Dalai Lama que no fructificó.
1978 fue el año en que se aprobó la reforma económica, caracterizada por la descentralización y la apertura. La renta per cápita de China representaba el 10% de la soviética y el 2 % de la de los EE.UU. El éxito de la reforma ha sido de tal magnitud que supera a cualquier otro conocido en la historia económica mundial. Pero la reforma se inició en el Este y se fue extendiendo hacia el Oeste posteriormente.
En Tíbet los mayores avances se contabilizan desde 1993. Desde esa fecha el PIB ha crecido por encima de los dos dígitos hasta hoy. Para el año 2000 era el doble de 1995, el cuádruple de 1990 y treinta veces el de 1950. Las previsiones apuntan a que continuarán con esas tasas de crecimiento todavía algunos años más, lo que ayudará a reducir las desigualdades.
Este crecimiento ha permitido reducir la pobreza extrema al 12%. Se ha incrementado la confianza en cumplir con el objetivo de acabar con ella, para 2020.
Cada año, el día 28 de marzo se celebra el Día de la Liberación de los Siervos.
Para concluir. Los británicos invadieron China. En colaboración con otros países incendiaron y saquearon su patrimonio y sus tesoros. Millones de chinos fueron asesinados, pero eso ya es historia. Sólo les queda un triunfo… pasajero: la usurpación del nombre del monte más alto del mundo.
Los tibetanos lo llamaron Chomolungma (o Qomolangma). Es el nombre de una benigna y protectora diosa muy apreciada en su cultura. Ese nombre ya figuraba en el Atlas Kangxi en Ia dinastía Qing, en 1721. En 1733 fue incluido con el nombre de M. Tchoumour Lancma en el nuevo Atlas de China, editado en Francia, dirigido por Jean Baptiste Bourguignon d'Anville. También en Alemania figuraba en 1836, en el mapa de Asia, pero los británicos 140 años después lo rebautizaon con el nombre de un militar topógrafo extranjero. ¡Qué ruindad!¡Qué machismo!¡Qué xenofobia!
Notas:
- En 1930 el novelista inglés James Hilton escribió la novela “Horizontes perdidos” en la que describía un utópico templo budista en el Himalaya que llamó "Shangri-la." La propaganda “occidental” pretende hacernos creer que Tíbet era ese paraíso.
- Goldstein. Tibetólogo estadounidense, nada partidario de China. The Snow Lion and the Dragón
- La familia del XIV Dalai Lama tenía 27 fincas, 30 pastos, y unos 6,000 siervos. Sólo el Dalai Lama tenía 160,000 taels (1 tael = 30 grams) de oro, 95 millones de taels de plata y unas 20,000 piezas of joyería y jade y más den 10,000 piezas of vestidos de algodón y cueros raros.
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